27 diciembre 2005

Canciones dulces y tristes... pero siempre dulces.

Me cuelo, aprovechando las rendijas tecnológicas que mi querida Perra Pelirroja me deja, para aliviar el peso de la balanza y dejarla de nuevo en el equilibrio que mi niña necesita. Quizá sea la mejor descripción de tí que he leido nunca. Léela con atención, mi niña, Los caminos de Ismael, como los míos, son tortuosos.


Eres


No das respuestas
ni luz a mi jardín,
y no hay guerrero
que descanse en ti.
No hay luna de agosto,
ni lluvia de abril,
que no haya dormido
antes en ti.

Eres pequeña
como una estrella fugaz,
como el universo
antes de estallar.
Vuelas como la risa,
como el diente de león.
Si yo te miento,
tú lo haces mejor.

Ahora dime qué te han de ofrecer
la tardes perdidas, tu sangre en mi piel,
la casa cansada, la manta en el sofá,
la tele encendida, las ganas de llorar.
Y ahora dime qué te van a dar
la paz en tu vientre, el fondo del mar,
gaviotas cansadas, mi sombra en el sofá,
la brasa encendida, las ganas de matar.

Eres la copa rota,
el mar en que me adentro,
viento que susurra,
el tálamo desecho,
ácido en mis ojos,
el café de mis mañanas,
la mano en el sexo,
el rumor de batalla.

No das respuestas
ni luz a mi jardín,
y no hay guerrero
que descanse en ti.
No hay luna de agosto,
ni lluvia de abril,
que no haya dormido
antes en ti.


Ismael Serrano.
Y recuerda que soy inmortal... y tengo todo el tiempo del mundo para esperarte.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿inmortal? quizá tu espíritu, tu cuerpo lamentablemente no. Y eso es lo terrible, que el tiempo pasa inexorable para todos, que queramos o no, la vida sólo da pequeñas oportunidades que o tomamos o dejamos pasar. Lo que se haga con ellas, es lo que va marcando la vida, nuestro camino, y nuestro final. Inmortal, tu espíritu y tus ganas de estar con quien quieras, la realidad es que no siempre se puede, o no siempre se quiere en el fondo, pero queda tan bonito decirlo!!