27 enero 2007

Frivolidades

Cuántos días sin pasar por otros callejones ya que sé (he visto) que nada cambia en ellos. Eran callejones alegres, húmedos, en los que solo se oían voces sensuales que te llamaban con cierta desesperanza placentera. Ahora a duras penas se escucha nada. Ahora están callados, inoloros, insaboros... Nada que los hagan distinos o que llaman al placer en estado puro, cada uno a su estilo, cada uno para cada momento...

Cada callejón para cada pecado. Cada callejón para cada vicio. Cada callejón para cada infracción morbosa, teniendo en cuenta que a cada uno le da morbo algo distintos. Un callejón por cada chupito de tequila, cada copa, cada cerveza en el que ahogar cada pena...

Nada queda ya. Nada queda para la desesperanza en la sumergirse, sumergirme. Todo quieto. Todo callado. Shhh... No hagas ruido... Creo que ya he dado con el motivo de esta situación...

No se quiere que se escuche cada mano que toca. Nadie quiere que se sepa que se lo que se sumerge por la falda. Nadie quiere que se sepa que están follando en los aseos. Nadie quiere que se sepa que se suspira de amor hacia él... Lo mismo que hacia ella... Todo el mundo miente. Es el cinismo lo que prima ahora...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿y donde está el callejón para nuestros pecados, perrita?

Perra Pelirroja dijo...

Búscalo en cada poro de mi piel y descubrelo tú mismo, Dis...

ClarOscuro dijo...

"El cinismo consiste en ver las cosas como realmente son, y no como se quiere que sean" (Oscar Wilde)

A lo mejor es que es lo que hay y no te has parado a pensarlo. Besillos

Perra Pelirroja dijo...

Geniales palabras que has recordado tú con la cita de O. Wilde, chica simple, que tieme mucho de chica, poco de simple. Lametones caninos, linda