28 noviembre 2006

errores


Me siento como una gran mancha de vino tinto en tu nueva y blanca camisa de lino. Una manzana podrida en el cesto. Un grano en el rostro de tu cuidada faz... Soy lo peor que te podría ocurrir, no se como enmendar todo lo malo que pueda ocurrir.

Me viste hermosa y lozana, demasiado sincera, sin tabúes, todo lo contrario a lo que ves en tu pueblo... y eso hizo que cayeras a mis pies. Me encantó verte tan virgen en demasiadas cosas, con ánimos de aprender, deseos (demasiados) que querer hacer real... y eso hizo que me abriese a tí.

Se que eso no debería haber pasado jamás. Pero pasó. Nos sentamos demasiado cerca del escenario... y, cuando eso pasa, uno se da cuenta de muchas cosas que hacen que se pierda el misterio del ballet.

4 comentarios:

yo dijo...

el misterio a lo desconocido, a lo contrario de uno mismo, siempre esta vivo dentro de nosotros, la diferencia es si nos tapamos los ojos y no queremos vernos, no queremos entener y comprender lo que nos pudieron traer esas atracciones.

Nada en esta vida, es por casualidad, mucha gente lo sabe, y tb tu y yo... y mucho menos, nadie es lo peor de nada. Cada uno tiene su encanto, y tu, lo tienes a la vista de todas aquellas personas que quieran verte, y sobre todo conocerte.

un beso mi cielo

Perra Pelirroja dijo...

Muchas son las personas (gente en mi "tiera" se dice a los escarabajos)que no se atreven a mirar más alla de sus narices. Desgraciadamente son las que más nos atraen, y tenemos que tener el control en nosotras mismas como para no caer... Cuando caes el porrafo es tremendo, como si un aerolito se estrellara contra la tierra... Dejando una marca que ni con maquillaje se pueda tapar...

Muchas gracias, niña guapa

Anónimo dijo...

¿por qué sentarse demasiado cerca del escenaria cuando te puedes subir a él? Ven, recupera la magia del espectáculo, está solo a tres pasos de ti.

Perra Pelirroja dijo...

No puedo, ni quiero, subirme en él, ya que desconozco el texto a interpretar, disgresor, me temo que adoro demasiado el teatro como para cargarme una obra tan sublime como la que se esta, ahora, interpretando allí.

Gracias por tus palabras...